Hace unas semanas fui a pedir informes sobre algo que había despertado mi curiosidad mientras estuve embarazada, era un lugar frente a una tienda comercial cerca de mi casa: un lugar donde daban clases de bailoterapia; rezaba el anuncio.
Pues ni tarda, ni perezosa, contrario a lo que siempre sucede fui el siguiente lunes junto a 2 amigas que tienen a sus hijos junto a Pk en el TKD. La primer clase la neta estuvo bien padre que decidí no dejar pasar la oportunidad de ser parte de este grupo de mujeres que por razones diferentes están unidas a esta clase: jovencitas y niñas que lo hacen por diversión, mujeres como yo que lo hacemos por salud y vanidad, señoras mayores que lo hacen por salud y distracción y unas cuantas más que solo lo hacen para desestresarse; así somos. Esta semana cumplí un mes y dejando de lado la estética me he sentido muy bien por ejemplo antes me cansaba de subir las escaleras de mi casa que son 6 miseros escalones, hoy con gusto puedo decir que si me duelen las piernas al hacerlo pero ya desinstale el tanque de oxigeno que estaba en lo alto de la escalera.
Ahora si a seguir bailando por gusto, salud física y mental.
Sobres, sobres, sobres sobres
